Presidente

A lo largo de mi actividad política y profesional puedo decir con orgullo que he participado en múltiples actividades que han llenado plenamente de satisfacción. He conocido gran número de personas, muchas de ellas interesantes, y he procurado siempre poner un grano de arena en aquellas obras que he considerado loables esfuerzos para conseguir un mundo mejor. Cuando los Trabajadores de la Siderurgia Integral me ofrecieron ponerme al frente de La Fundación que habían creado y a la cual han puesto este nombre tengo que decir que no me planteó muchas dudas tanto por el objetivo que presentaban ante mí como por el colectivo humano que lo promovía y lo quería poner en marcha.

Creo que no es para menos. La Fundación de los Trabajadores de la Siderurgia Integral se ha constituido con los fondos de la denominada caja complementaria de los antiguos trabajadores de Altos Hornos de Vizcaya, caja destinada a cubrir las carencias de los obreros cuando los sistemas de previsión social solamente cubrían a unos cuantos privilegiados. cuando ha llegado el momento de disolver dicha caja hay que reconocer como enormemente loable y generoso el empeño que a dicho dinero se ha dado como es la de crear una Fundación que ponga el valor, los esfuerzos que en un duro pero modélico proceso de reconversión industrial fue llevado en nuestro país donde una sociedad supo ser generosa con aquellos trabajadores que perdían su trabajo por dicho proceso industrial y ahora ellos se aprestan a devolvérselo a los ciudadanos mediante la iniciativa de la realización de múltiples actividades de carácter formativo, de cooperación y de valoración de nuevas iniciativas emprendedoras. Pero además me gustaría en esta presentación poner también el énfasis en un hecho que me parece especialmente importante en un país como el nuestro donde a veces la solidaridad entre personas y territorios parece olvidarse. Los trabajadores vascos no han querido ser solitarios en este empeño y han ofrecido a sus compañeros de otras regiones de España, trabajadores igualmente de la siderurgia integral, a participar con ellos en este bello e ilusionante proyecto.

Por ello, La Fundación de Trabajadores de la Siderurgia Integral pretende integrar a todos aquellos que trabajaron en las grandes empresas públicas de la siderurgia integral en las postrimerías del franquismo y en los primeros años de democracia y, así, Ensidesa, Altos Hornos del Mediterráneo y Altos Hornos de Vizcaya, nombres que ya son historia en nuestra vida industrial, se han unido para dejar testimonio ante generaciones presentes y futuras de que lo esencial en todo empeño humano son las personas y su capacidad para aportar conjuntamente lo que cada uno lleva dentro.

Quiero finalizar estas líneas pidiendo a todos los que os acerquéis a La Fundación de los Trabajadores de la Siderurgia Integral no sólo que valoréis positivamente esta iniciativa sino tanto al mundo de la política, al mundo de la empresa y al mundo del trabajo que sepan unir con nosotros sus esfuerzos en eso que puede ser un tópico hasta que lo hagamos realidad, en definitiva, construir entre todos un mundo mejor.

Un cordial saludo,

José Luis Leal Maldonado
Presidente de La Fundación de Trabajadores de la Siderurgia Integral